CEREMONIA DE LAS VELAS PARA BODAS CIVILES
Os casáis que deseáis hacer de vuestra boda algo mucho más especial y personal el ritual de la ceremonia de las velas. Una opción muy romántica, diferente y emotiva.
La ceremonia de las velas, también conocida como ceremonia de la luz, es un ritual pagano que simboliza la unión de la pareja en uno solo y el comienzo de una vida juntos, mediante el compromiso del matrimonio. Aunque se trata de un ritual pagano, son muchas las parejas que desean incluirlo en su ceremonia religiosa. En cuyo caso, es necesario consultar con el párraco que oficiará la ceremonia. Pero, por lo general, son las parejas que se decantan por una boda civil, quienes incluyen este ritual para hacer algo más íntimo y especial.
Lo único que necesitaréis son 3 velas, una grande y dos más pequeñas. Las cuales, utilizaréis para encender a la vez la vela grande y estática en el centro del altar. Simboliza la unión de la pareja y un nuevo comienzo.
No existe un momento específico en el que se deba llevar a cabo la ceremonia de las velas. Hay total libertad para esto. Aunque, si no sabes cuando incluirlo, una buena opción es tras el sí, quiero.
Cada uno de vosotros, debéis encender la vela grande con vuestras velas pequeñas, a la vez. Las velas pequeñas pueden permanecer encendidas desde el comienzo de la boda o justo antes de comenzar con el ritual, y podéis encenderlas vosotros mismos o pedir a los padrinos que participen con vosotros.
Esas velas quien os ofrecen son vuestros padrinos simboliza el pasado, lo que habéis sido hasta el día de hoy, dos personas independientes y libres, de gran fortaleza, llenos de ilusiones y planes de futuro. Y habéis decidido uniros
en matrimonio, juntar vuestras llamas en una sola que arderá con más fuerza e ilusión aún, representando el compromiso del uno con el otro.
Podéis pedir a alguien cercano que lea un poema o un texto, o vosotros mismos intercambiar unas palabras de lo que significa para vosotros el nuevo camino que vais a emprender. Después, encended a la vez la vela grande.
Hay quienes deciden apagar inmediatamente las velas pequeñas, simbolizando que desde ese momento, pasáis a ser una sola persona. O quienes, dejan las tres velas encendidas, símbolo de dos personas diferentes, con distintas personalidades pero que, deciden desde ese momento, comenzar una nueva vida juntos.
Sólo tengáis que encender esta vela por las muchas alegrías que os reserva el destino, pero si tuvierais que hacerla brillar en momentos de tristeza, aprended a superar, apoyado el uno en el otro, los obstáculos que puedan aparecer en vuestro camino.
En este momento, una vez encendida la vela del día de vuestra boda, en vuestras manos está dejar también prendidas las velas del pasado, que os recuerdan que seguís siendo personas únicas y singulares dentro de esta unión, o podéis extinguir sus llamas y dejar que la luz de la gran vela os represente a los dos a partir de ahora...
