El glitter bar es la tendencia estrella en las bodas de esta temporada. Un servicio de maquillaje a base de purpurina, brillos y piedrecitas de strass con el que dejaréis boquiabiertos a todos vuestros invitados.
Hablamos del glitter bar, la nueva tendencia que está causando furor en los enlaces y en los festivales de música. Una propuesta que sí o sí debéis tener si queréis una boda moderna, instagrameable y divertida.
El glitter bar está llamado a ser el nuevo fotomatón. Una opción fantástica para añadir diversión a vuestro gran día.
Glitter bar se trata de un córner o rincón especial que se instala en la celebración de una boda y que sirve para que parejas e invitados añadan algún detalle en forma de brillos, gloss o purpurina a su maquillaje. Lo suyo es contratar un servicio profesional que se encargue de montar un glitter bar a medida, con una mesa bien decorada, un gran espejo con luces, pinceles, geles y frascos de purpurina, tatuajes temporales metalizados.
De esta forma, no tendréis que preocuparos de cómo disponer todos los productos o cómo animar a los invitados a que participen y decoren su piel, ya que habrá expertos para ello. Unos especialistas que a su vez colocarán los brillos, harán los retoques pertinentes y darán los consejos apropiados para que el maquillaje se mantenga fresco y vivo hasta el final de la fiesta.
Si contratáis el servicio con una empresa de animación o con una maquilladora profesional, ellos serán los que se ocuparán de llevar a la fiesta todo lo necesario para montar el glitter bar. Desde la purpurina y las piedrecitas hasta los tattoos temporales, el pegamento, los pinceles y el propio stand, con su mesa, sillas, espejos, luces y decoraciones extra.
Dado que este tipo de maquillaje es ideal para la celebración posterior a la ceremonia, lo ideal es montarlo tras el banquete. Por ejemplo, durante el baile. Pensad eso sí que si desplazáis la fiesta a otro salón o estancia será allí donde deba estar situado para la comodidad de todos.
Podéis colocarlo en un rincón aparte, para que no moleste así a los invitados que quieran darlo todo en la pista de baile, o en un lugar más central, para que grandes y pequeños lo vean y acudan a él. En ambos casos, lo ideal es que el stand sea llamativo y esté situado en un lugar visible y convenientemente señalizado.
El maquillaje que se puede aplicar en un glitter bar es bastante variado pero, como su propio nombre indica, está inspirado en el brillo y la purpurina. Y qué productos suelen usarse. Las gemas faciales, los brillos y purpurinas de todo tipo en gel, polvo o pegatina, los tatuajes temporales.
Lo más habitual es poner purpurina en zonas estratégicas como los pómulos, los párpados o la frente, pero también se puede aplicar en el pecho, los hombros, los brazos, las pestañas y hasta en el pelo o la barba. Además, para un resultado más vistoso, se pueden colocar aplicaciones en forma de piedrecitas o strass de diversos tamaños y texturas.
Así que animad vuestra celebración con un glitter bar para bodas, un detalle que recordaréis siempre. Estamos seguros que esta temporada se convertirá en todo un imprescindible para marcar la diferencia y despuntar en modernidad y originalidad...
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